A pesar de todo lo que ha nevado este año, apenas había ido a esquiar: un par de días de toma de contacto en plan tranquilo con mis sobrinos en La Pinilla, un par de días haciendo travesía por la sierra de Guadarrama y ya.
Y a estas alturas del año ya pensaba que no esquiaría más y que tras seis años sin visitar una estación de esquí más o menos grande, tendría que pasar un año más.
Pero no.
A última hora y con una buena oferta, nos fuimos Dani, Chus, Ernesto y yo unos días a esquiar a una de las pocas estaciones de esquí abiertas en todo el Pirineo, Ordino-Arcalís en Andorra.
Las pistas estaban vacías de gente y llenas de nieve, así que pudimos aprovechar muy bien el tiempo y tras interminables repeticiones y ejemplos, el último día entendí a lo que Dani y Chus se referían con "conducir los giros". Y creo que me salió y todo.
Ahora sí, habrá que esperar hasta la temporada que viene para seguir practicando y poder seguir a éstos en sus "fuera pista".
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