En Bolivia le añadían además:
El libro de Charles C. Mann que titula esta entrada es una visión de lo que debía ser América antes de la llegada de los Europeos. Basado en los últimos estudios arqueológicos y antropológicos, nos da una imagen de América muy distinta a la que tradicionalmente nos han dado.
En una Europa recién salida de la Edad Media, la América precolombina, estaba poblada por sociedades tan complejas, avanzadas y populosas como las europeas, si no más.
Que la conquista española fue un desastre humanitario y un abuso mayúsculo, no lo pone en duda nadie, que los asesinatos, torturas, violaciones y demás era la norma (todo bendito, eso sí), está claro, pero que un país relativamente pequeño como España, pudiera conquistar con tanta facilidad un continente entero, es lo que se pone en duda en este muy recomendable libro.
Resumiendo, el libro nos viene a decir, que los mejores soldados fueron el General Viruela y sus secuaces, y que sin ellos hubiera sido imposible haber conquistado América. De modo que si Hernán Cortés y Francisco Pizarro fueron capaces de acabar con dos imperios, el azteca y el inca, tan fácilmente, no fue solamente porque se aliaron con los indígenas que vivían bajo el yugo de esos imperios, si no, y sobre todo, porque para entonces esos imperios estaban demográficamente diezmados por las enfermedades traídas por los españoles. Lo mismo para el resto de europeos conquistadores, con la única diferencia que mientras los españoles expoliaban las tierras para llevarse las riquezas de vuelta a su país, los ingleses, entre otros, expoliaron las tierras ¡para quedárselas!
Esto no justifica ni excusa a las potencias colonizadoras europeas, pero lo que está claro es que antes o después el encuentro entre Europa y América se habría producido y aunque se hubiera producido por la vía pacífica, la devastación demográfica se hubiera dado de todos modos, (aunque se hubieran salvado las culturas).
Y no justifica a Europa, porque muchos años después se colonizó otro continente, África, y ahora sí con una superioridad tecnológica apabullante, y sin embargo se diezmó, arrasó, esclavizó y sojuzgó de un modo absolutamente inmoral que sigue aún en nuestros días con nuestra connivencia.
Con esto quiero llegar a dónde empezaba. Cuando me han reprochado la conquista por ser español, lo que están realmente haciendo es dejar aflorar sus frustraciones por la incapacidad de sus propios países de salir adelante, en vez de recapacitar que es lo que se está haciendo mal en el presente para estar como están. España, como nación, ha sido conquistado, diezmado, arrasado, esclavizado y sojuzgado unas cuantas veces a lo largo de su historia y jamás, a nadie, se le ocurriría ir al centro de Roma a pedir que nos devuelvan el oro de Las Médulas, a París a pedir cuentas por la visita napoleónica...
Otra cosa que suelen achacarnos a los españoles y que va ligada a la conquista es la cristianización y la inquisición. Está claro que la llevaron los conquistadores españoles, pero ambas son responsabilidad de la Iglesia católica, apostólica y romana aparte de España, y la Inquisición fue una institución de la Iglesia, que como tal tenía "Santos Oficios" en todos los países europeos, y que mató más gente en Europa (judíos, judaizantes, cátaros, moros, moriscos, mudéjares, homosexuales, gitanos, ateos, brujas, herejes, infieles, apóstatas, gnósticos, ácratas, y un largo etcétera) que en ningún otro sitio.
Como siempre me recuerda Mónica, y siempre le reprocho aun a sabiendas de que es un buen lema, "haz de cada problema una nueva oportunidad"