26 noviembre 2007

Safari

Viaje, en swahili.
Por simplificación, viaje con destino a África para ver su fauna salvaje.
Simplificando más, ruta a pie o en vehículo a motor por el interior de un parque o reserva para disfrutar de la fauna salvaje sin matarla, que por muy salvaje que sea, siempre lo serás tu más si lo haces (y si lo haces ya no se llama safari... que cada uno ponga los nombre, y adjetivos, que considere más oportunos al incongruente hecho de disfrutar de los animales matándolos).
¡Vamos! simplificando, que ya he hecho unos cuantos safaris de esos del tercer apartado, y ya va siendo hora de que ponga algunas fotos de lo que he visto, cuente algo al respecto y me deje de tanto rollo.
Allá va un recopilación de los mejores momentos vividos en estos cuantos safaris, unidos y mezclados a modo de superéxitos anuales:
Nos subimos en un Toyota Land Cruiser adaptado de tal modo que cuenta con once plazas, dos normales para el guía y acompañante (últimamente ése soy yo) y otras nueve en una especie de bancas elevadas sobre la parte trasera de la cabina del vehículo, que hacen que vayas bastante por encima de lo normal, mejorando mucho la perspectiva y la visibilidad.
Salimos por la puerta. Aunque hay quien dice que no se pueden poner puertas al campo, la verdad es que la mayoría de los parques africanos están vallados. En Gorongosa todo el perímetro del campamento de Chitengo está rodeado por una fuerte valla protegida por distintos guardas.
¿Todo?
¡No!
En un extremo y protegido por nada, resiste ahora y siempre, un pequeños grupo de tiendas a toda invasión animal exterior.
Una vez fuera de Chitengo empieza oficialmente el safari.
El guía pregunta a los turistas si tienen algún interés en especial, refiriéndose a los animales ¡claro! y la gran mayoría contesta leones o elefantes (a falta de tigres...)
Así que al doblar el primer baobab, Toni, el guía zimbabuense al que deberían subtitular, se baja extasiado del coche (está prohibido así que nadie le sigue), coge una minúscula, irrelevante y discreta flor; la huele; la mira; la vuelve a mirar, y con su media sonrisa se la enseña a los asombrados turistas que todavía miran a todos los lados en busca de leones y elefantes mientras acompasan su taquicárdico corazón.
Así transcurren las primeras horas de los safaris de Toni, extasiándose en los pequeños detalles, mientras la paciencia de la gente va disminuyendo, las ganas de ver animales grandes aumentando y las bradicardias sustituyendo a las taquicardias.
Todavía en la parte de bosque, se da la típica escena de las películas donde el coche del bueno corre y cruza un paso a nivel justo antes de que pase el tren, que es el punto culminante de una evolución que va desde los perros callejeros empeñados en parar todo coche que se cruce en su camino, hasta los facoceros que corren delante del coche para, con un giro de cintura que ni Romario, cruzarse cuando menos te lo esperas.
Se escuchan los gritos de los babuinos, se ven las cabriolas de los monos, los saltos de los antílopes, se huelen las mierdas de los grandes animales y se sienten la meadas de las cícadas.
El Parque Nacional de Gorongosa, cuenta con 74 tipos de vegetación diferentes, lo cual es mucho, y lo cual hace que tenga una gran diversidad vegetal y en consecuencia, animal; de ahí su gran interés.
Como ya sabéis la fauna está bastante mermada, aunque apenas se han extinguido completamente unos pocos animales, pero la vegetación y los paisajes permanecen bien conservados.
El parque se compone de un tipo de bosque semideciduo tropical, llamado miombo, en las zonas altas no inundables , y grandes praderas inundables en las zonas bajas cercanas a las cuencas de los ríos. Entre ambos hay todo un gradiente que debe tener los 72 tipos de vegetación que me faltan (¿o pensábais que iba a describir todos eh? ¡que ya estábais asustados!)
Las praderas inundables o llanos de inundación, se parecen a las famosas praderas llenas de animales de los documentales, sólo que no están tan llenas y que los animales no tan famosos como las zebras, los búfalos o los ñues (esos a los que se comen los cocodrilos cuando cruzan el río Mara), como antílopes sable, jeroglífico, de agua, oribi, impala, niala, cudu y un largo etcétera.
Además, el parque cuenta con más de 450 aves, 80 reptiles, 30 anfibios y 370 árboles diferentes confirmados (¡o por ahí!).
Después de estar extasiados por las hormigas matabilli, los escarabajos peloteros, nidos de espuma de las ranas nido de espuma, mil y una flores y tras revisar toda huella, excremento o señal más o menos de procedencia animal no dudosa, se llega a donde están los animales en grandes cantidades, justo antes de sufrir un motín a bordo.
Entonces llega el momento en que nos tropezamos (y nunca mejor dicho) con una boñiga de elefante.
Toni para el coche, abre la puerta, estira el brazo, mete los dedos, se los huele y da su veredicto en forma de período temporal, cuya longitud está inversamente relacionada con el ímpetu del deseo de ver el presuntamente cercano, en el espacio y el tiempo, autor de ese ¡montón de mierda!
Este artefacto teatral de todo guía que se precie, hace aumentar las ganas de ver el animal objeto de anhelo y se va alimentando sabiamente a lo largo de todo el recorrido, ¡digo! safari, con pequeñas dosis en forma de pistas, más o menos escatológicas.
Un poco más allá se encuentran unas huellas, seguimos y de nuevo una boñiga, más adelante unas ramas rotas (todas las ramas rotas de los 4000 Km2 del parque las han roto los apenas 200 elefantes que tiene), tras un pequeño bosquete nos topamos con más huellas, boñigas y ramas rotas todo junto y revuelto, o no.
La gente suspira emocionada como invocando a todos los elefantes del mundo.
Los elefantes barritan acongojados como invocando la invisibilidad.
Pasan los facoceros, las flores y los escarabajos peloteros y seguimos sin avistar elefantes.
Toni, para cortar la tensión, explica que vamos a ir a unas pozas del río Urema donde recientemente se han visto hipopótamos.
Distinto objeto, mismo proceso: visualización de huellas e imaginación de la escena con movimientos de capoeira incorporados, tropiezo con boñigas, manoseo y olisqueamiento de las mismas, y encuentro con la senda por la que bajan, casi que resbalando, los irascibles paquidermos .
En una pequeña poza cubierta de lirios acuáticos con bellas flores lilas por donde revolotean las jacanas y pululan las libélulas, asoman las orejas, los ojos y la nariz de varios hipopótamos, poco después asoma el lomo y otro poco después se sumergen de nuevo.
De los turistas gringos se escucha invariablemente (transcripción fonética): ameisin!... Ni más; ni menos.
De los turistas surafricanos e ingleses, variablemnete: ekselen! interestin! greit! guondarfal! marvalious! y a veces también, emaisin!
Tendemos a asociar lo gordo con lo afable y bonachón, pero lo cierto es que los hipopótamos son el animal africano que más muertes causan al año en todo el continente.
Después de ver los hipopótamos, y después de apaciaguados los momentos de emoción, la gente recuerda sus anhelos originales: quieren ver leones o elefantes, si no ambos.
De modo que hay que usar técnicas más agresivas para que los elefantes se manifiesten.
La siguiente boñiga, (¡es increíble la cantidad de boñigas de elefantes que puedes ver con los pocos que hay!, va a ser verdad lo de las ramas), es la oportunidad perfecta para acometer esta nueva técnica.
Para el coche, abre la puerta, ¡desciende del coche!, coge un puñado de estiercol paquidérmico, se asombra de los caliente que está (claro toda la mañana al sol tropical...) y se lo pasa a todos los turistas para su verificación manual o digital, según los escrúpulos de cada uno.
Las caras de los turistas dan para un estudio sociológico o coprológico, según en lo que te centres... aunque bien pensado no creo que haya mucha diferencia.
El tiempo se acaba, y aunque hemos visto en una mañana más mamíferos terrestres de tamaño medio grande que en toda mi vida en Suramérica, la gente se va con la única idea de que no han visto elefantes (a pesar de los innumerables y aromáticos indicios) ni mucho menos leones (sin indicios numerables ni aromáticos).
La continua verificación de la temperatura boñigal nos ha retrasado y hay que volver rápido, ferrari safari, dice Toni entre risas complacientes y condescendientes de los defraudados turistas.
Sin embargo, un turista surafricano que ha estado una vez en Kruger y con más vista que el que vendió el politono del ¿Por qué no te callas?, ve escondidos detrás de unos árboles a cuatro elefantes cuando íbamos a cincuenta por hora.
Claro, ahí sentados leyendo esto, pensaréis que ¡cualquiera se salta cuatro elefantes!, pero os aseguro que a más de cien metros de la carretera, a unos cincuenta kilómetros por hora y en una zona de bastante vegetación, ver cuatro elefantes agazapados, tratando de pasar desapercibidos después de la que han montado por todo el parque, no es moco de pavo, o caca de elefante.
Las consecuencias del furtivo avistamiento suponen la felicidad del grupo y el regreso a Chitengo se torna alegre y relajado.
Toni se gana su propina.
Y ahora las fotos que, más o menos, verifican todo lo escrito (más o menos porque se me ha estropeado el zoom de la cámara, así que...)

El vehículo que se utiliza para los safaris. En Mozambique, como en casi toda África subsahariana, se conduce por la derecha, lo cual es un lío


Primera foto que nos hemos hecho en tierras mozambiqueñas. Lo de atrás es un termitero y algún día hablaré de ellos y sus habitantes. Fascinante tema, las termitas, digo


Parada típica en el río, casi seco, Musicadzi, para ver aves, cocodrilos y quizá hipopótamos


Garza Goliat, llamada así por ser la más grande del mundo. La foto no es muy buena, pero es que estaba muy lejos...


Águila pescadora africana, nada que ver, ni que envidiar, al águila calva símbolo de los EEUU


Babuinos traspasando la no valla cerca de nuestra tienda. Si pueden ellos... ¿pueden los leones?


Mono preguntándose si lloverá hoy o tendrá que seguir bebiendo de los charcos artificiales que hay frente a nuestra tienda


Otros que vienen a la zona no vallada a beber... o mamar


Y la madre, con cara de preocupación típica de todas las madres


Óribi, pequeño antílope, muy ágil y veloz, que por esta vez se quedó a curiosear qué hacíamos


Huella de hipopótamo. A falta de fotos de hipopótamos ya que se me ha estropeado el zoom de la cámara, pues pongo las huellas y con esto os apañáis


Antílope Sable, viéndolas pasar


Los elefantes, que estaban tan escondidos que sólo se ven dos de los cuatro que había. La foto está hecha poniendo la cámara pegada los prismáticos, por eso que la calidad no es muy buena, pero valga como documento (no se me ocurrió antes, por eso que no tengo de los hipopótamos con la misma sofisticada técnica)
Y esto es, más o menos un safari (o siete) en el Parque Nacional de Gorongosa.

23 noviembre 2007

Paradojas

África es el continente más rico del mundo.
Tiene el segundo bosque tropical más extenso del mundo, las mayores reservas de diamantes, algunos de los espacios naturales más grandes y mejor conservados del mundo que atraen multitud de turistas, un mercado éste, con un potencial gigantesco en todo el continente. La barrera de coral costera más larga del mundo, dos de los caladeros pesqueros más importantes y menos sobrexplotados, las playas más paradisíacas y menos explotadas, los animales salvajes más atractivos del mundo, que suponen un valor muy en alza...
África posee el 30% de las riquezas minerales de todo el mundo (incluyendo el petróleo) y, por ejemplo, casi la totalidad (el 80%) del coltan del mundo está en la República Democrática del Congo (antes Zaire, antes Congo Belga)
África representa el 1% del PIB mundial, tres puntos menos que hace cuarenta años. De ser independiente, Las Islas Canarias, serían el país más rico del continente.
¿Que qué es el cotán? ¡Preguntáselo a tu móvil! Pero seguro que la gente del Congo desearía que no estuviera en su país.
Éste último país es, probablemente, el país más rico del mundo y sin embargo es, probablemente, el país más pobre y desgraciado de todos.
Soportó el peor colonialismo que ha existido en África, y seguramente en el mundo, bajo el yugo del rey Leopoldo II de Bélgica, territorio exclusivo para su solaz y enriquecimiento personal.
En conflictos armados desde su independencia en los años 60 y en guerra civil oficial desde 1996 (aunque por la cantidad de países implicados, Uganda, Ruanda, Burindi, Namibia, Angola, Chad, Sudán y Zimbabwe, además del Congo, hay quien la califica como guerra mundial africana).
Desde hace tres años está oficialmente en paz, lo que no es cierto, y lo que hace a la guerra peor si cabe, ya que además de morir una media de 40.000 personas al mes, desde los acuerdos de paz (en Irak esa cifra no llega a 4000), se calculan 7 millones de muertos desde el 96, y aún así para el mundo mediático es como si no hubiera guerra, como si no existiera.
Está completamente abandonado a su suerte.
Al principio de la guerra, a finales de los 90, Kabila, líder rebelde por entonces, decía que se podía montar una rebelión con 10.000$ y un teléfono satelital.
El dinero para comprar soldados, (no hace falta mucho para comprar a gente absolutamente desesperada) y el teléfono para especular con las riquezas del país con las empresas del primer mundo, que pondrían el resto del dinero necesario para llegar al poder.
Llegó al poder.
El reclutamiento de los niños-soldado, lo cuenta Paul Collier en su libro The Bottom Billion (algo así como "El millardo del fondo o de abajo") fríamente, como si tal cosa: los gerrilleros van a un poblado, matan a todo el que ven, se acercan a la escuela, empiezan a disparar, los niños salen corriendo, los que se salvan los apresan y se los llevan vivos. Les dejan tomar la decisión de unirse a ellos o no. Los que no se unen mueren. Los que se unen tienen que demostrar su lealtad con un acto de adhesión. Les envían a su comunidad y les obligan a matar, violar, torturar o todo a la vez, a alguien conocido. Con ésto se aseguran que la vergüenza les impedirá querer regresar más tarde. Una vez pasada la "prueba", les drogan casi constantemente y pasado cierto tiempo son incapaces de reconocer lo que está bien de lo que está mal.
Estos guerrilleros son hoy los que básicamente siguen con la no guerra del Congo.
Para sus actos más recientes se ha descrito un nuevo término: feminicidio: Muerte sistemática de la femineidad por violación constante.
Los varones mueren antes, aunque sin tanto sufrimiento, para poder llevarse a las mujeres.
Se han demostrado estadísticamente las razones por las que un país recae en la guerra civil, y las más importantes son el bajo nivel económico y la gran riqueza de recursos naturales, especialmente minerales.
Así que, por mucho que digan algunos, en España no estamos al borde de un nuevo enfrentamiento. Somos ricos, tenemos mucho que perder, y no tenemos muchos recursos naturales.
El bajo nivel económico hace que la gente no tenga nada que perder y los recursos naturales hacen que la gente que no tiene nada que perder, intente montar la guerra por su parte para hacerse con el control de esos recursos y así enriquecerse. Y siempre habrá alguien que le apoye en el mundo rico y "civilizado"
Después de casi 30 años en guerra, Mozambique se ha librado de una recaída en los últimos 15 años, probablemente porque no tiene recursos minerales valiosos; en caso contrario yo no estaría aquí y Mozambique estaría en la situación de países muy ricos en conflicto casi constante como el Congo, Angola, Nigeria (por cierto que en las partes de Nigeria sin explotación petrolífera, cuando alguien va a hacer exploraciones petrolíferas les echan a pedradas, no quieren que se encuentre petróleo en sus tierras: la respuesta a este comportamiento inusual la encontrarás en el delta del Niger), Guinea Ecuatorial, Costa de Marfil, Sierra Leona, Sudán...
Sólo Botswana (el país con mayor crecimiento económico del mundo en los últimos años), Namibia y Suráfrica, con grandes riquezas naturales, se salen, afortunadamente, de este patrón.
Y ahora unas fotos encantadoras después de tanta desazón consciente e intencionadamente producida, para contrarrestar los efectos de las próximas navidades (ya iré administrando más antídoto).

El baobab de Vinho, que además de oficina de censo, es taller de bicicletas (desde que está la fundación en el parque, aquí todo el mundo ha podido comprarse una bicicleta para ir al trabajo), mercado improvisado y lugar principal de la plaza del pueblo


Como una familia en miniatura, las hermanas mayores se ocupan de los hermanos que ya no maman. Los amigos de las hermanas, juegan con los hermanitos


No a todas las niñas les gustan los muñecos. Ésta en concreto se la veía muy cansada de llevar a su hermano todo el día y se veía muy limitada para ir a jugar con los demás niños de su edad


En la plantación en los terrenos de la nueva clínica, se podía notar que los niños y niñas están muy acostumbrados a trabajar en el campo y que manejan la azada mejor que cualquiera de nosotros. Mientras les explicaban lo que había que hacer, se dedicaban, de manera autómata, a limpiar con la azada el suelo de "malas yerbas"


A los niños les encanta que les hagas fotos y, sobre todo, que luego se las enseñes. ¡Se parten de risa!


Con una planta a punto de ser transplantada. Fijaos que el recipiente de la planta no es más que corteza de planta de banano. La cuerda para marcar los agujeros donde plantas, también estaba hecha con este material. No desaprovechan nada


Mostrando su mejor sonrisa para acto seguido verla en la pantalla. Lo que tiene entre las manos es una cubierta de bicicleta inservible, su único juguete, que no se lo trajeron los reyes porque sus padres no tienen dinero. La camiseta es de "Barbie". Lo que parece una entrada en medio está producido por la sarna

Después del ataque a las torres gemelas de Nueva York, casi todos los músicos del mundo cancelaron sus actuaciones en muestra de condolencia. Sólo, que yo sepa, un músico (Manu Chao) tuvo el acierto de no cancelarlos argumentando que según eso, no volvería a tocar jamás. No debemos dejar de hacer nuestra vida, pero sí ser conscientes de cómo la vivimos. Responsabilizándonos de nuestro impacto en el mundo, lo minizaremos y entonces minizaremos nuestra resposanbilidad y la asumiremos mejor y minizaremos nuestro impacto y...

22 noviembre 2007

Muerte entre las flores

El otro día fui a un lugar llamado "Bue María" cercano a Chitengo. Es un bonito lugar bastante elevado sobre el río Pungwe, así que tienes unas vistas increíbles de todo el bosque de miombo (que así se llama la sabana arbórea donde está situado el parque), el río y las montañas al fondo.
Iba con la gente que está haciendo el inventario de plantas (ya sabéis mucho más que contarlas), y Mónica me había dicho que por esa zona había minas, así que no debía salirme del camino.
En cuanto llegamos comencé a quedarme un poco por detrás de ellos, así como quien no quiere la cosa... para disimular me ajusté las sandalias (¡podría quedarme sin piernas, pero no sin sandalias!), y procedí a seguirles.
Poco tiempo después vi que iban sin cuidado por todas partes, así que supuse que no había minas en el lugar o que ellos carecían de la información que yo poseía. De cualquier manera, preferí despreocuparme.
La zona era una antigua granja colonial donde todavía se podían ver los restos de las construcciones allí presentes, ya invadidas por la vegetación y sobre todo por las higueras, ¡increíbles árboles!
Recolectamos unas cuantas plantas, fotografié una lagartija nueva para mí y regresamos.
Esta mañana han llamado a la puerta de la oficina de Mónica, donde yo estaba revisando mi correo, y nos han dicho que habían encontrado tres minas en el vertedero de Chitengo, donde precisamente el otro día estuvimos tirando toda la basura recolectada tras la operación organizada por Mónica a tal efecto.
El caso es que nos han avisado para que no nos asustáramos, ya que las iban a explotar.
Treinta minutos después y absortos en las pantallas de nuestros ordenadores, un fuerte ruído grave y seco, nos saca del ciberespacio y nos recuerda lo que ya habíamos olvidado.
La oficina, la típica caseta de obra, retumba de arriba a abajo. No me puedo creer que eso esté pensado para herir personas y no para matarlas. Eso me explota cerca y me muero del susto.
Unos minutos más tarde y hacen explosión la segunda y poco después la tercera.
Incluso ésta última asusta.

El río Pungwe desde Bue María


Una de las plantas recolectadas. En el momento de la recolección no sabían exactamente lo que era, y ahora yo todavía no lo sé


Una pequeña higuera abriéndose camino entre las rocas para crecer. La vida de estos árboles es mucho mas interesante de lo que pueda parecer, y el ciclo de los higos (que no son frutos, sino conjuntos de flores) es increíble


Restos de la granja colonial


Más restos, éstos con pinta de haber formado parte de las cuadras. Las construcciones de las casas son muy similares a las actuales viviendas españolas, sobre todo en lo que se refiere a la robustez de los muros

Las minas antipersona siguen matando gente. Y va para largo ya que se calcula que hay más de 110 millones de minas enterradas.

21 noviembre 2007

A principios del Siglo XX, África estaba colonizada por Europa, y Mozambique en concreto por Portugal.
La manera de disfrutar de la naturaleza en aquellos días, los pocos que habían llegado a esa necesidad, lo hacían cazando, por lo que los grandes espacios naturales hoy famosos en todo el mundo, no eran más que grandes cotos de caza. En los años 20 ya se dieron cuenta de que estaban cazando demasiado y a través de las llamadas "Jornadas de Londres", los países colonizadores decidieron establecer unas reservas en las que no se cazara, a semejanza de los grandes parques nacionales americanos.
Puede parecer paradójico, pero como dijo Fernando González Bernáldez, "prefiero a los niños que matan pájaros a aquéllos que son indiferentes; a los primeros se les puede educar, pero la indiferencia de los segundos es irreversible".
Antes de eso, apenas había tres parques en África, siendo uno de ellos el Kruger en Suráfrica, donde fuera de este parque ya se había acabado con casi toda la fauna a finales del siglo XIX.
A partir de esas "jornadas" se formarían los parques más famosos de toda África, como el Tsavo de Kenia, el Serengueti de Tanzania y el Gorongosa de Mozambique. Éste fue el primero de todos ellos, declarado a principios de los 30.
A finales de los años 60 recibía más de 20 mil visitantes al año.
La lucha por la independencia de Portugal comenzó en 1964 y tras la caída del régimen dictatorial en 1974, las cosas se precipitan y se declara independiente el 25 de Junio de 1975 tras los acuerdos de Lusaka.
El FRELIMO (Frente de Liberación de Mozambique) ha gobernado desde entonces el país. Estuvo implicado en una guerra no declarada con Rhodesia, hoy Zimbabwe, para ayudar a la liberación de este país, en manos de una minoría blanca. Gracias a su declaración como marxista-leninista, estuvo recibiendo apoyo de la URSS hasta su desmembramiento en 1989, momento que aprovecharon para borrar lo de marxista-leninista.
Por otra parte el RENAMO (Resistencia Nacional de Mozambique) con apoyo del régimen del apartheid de Suráfrica, y a su vez apoyado por EEUU en su lucha contra el comunismo, (aunque EEUU siempre se mostró en total desacuerdo con el apartheid), estuvo combatiendo al gobierno del FRELIMO duramente, hasta los acuerdos de paz llevados a cabo en Roma el 4 de Octubre de 1992.
Así que desde mediados de los 60 en que comenzó la lucha independentista, hasta el 92, con guerras civiles, guerras no declaradas con Zimbabwe y con Suráfrica, Mozambique ha estado casi 30 años en guerra, con más de un millón de muertos y más de seis millones de exiliados, y refugiados, en un país con menos de 20 millones en la actualidad.
Desde 1994 hay elecciones libres y la democracia se abre paso en el país, sin que haya recaído en la guerra civil como es habitual. Por supuesto el gobierno no es fácil en este país más grande que España y Portugal juntos y con sólo una carretera que lo cruza de norte a sur.
La zona del Parque Nacional de Gorongosa, en el epicentro del país y de la guerrila del RENAMO, fue muy castigada durante la guerra, habiendo sido masivamente minada (cualquier cosa que quieres hacer tienes que pagar primero la desminación del lugar), y donde la única fuente de proteínas eran los animales salvajes.
Por supuesto el turismo en el parque desapareció, además de la guerra, no había animales que ver.
Desde 1997 el ministerio se hizo cargo de nuevo del parque, poniendo guardaparques y poco más. Gracias a esto las poblaciones animales comenzaron a recuperarse, pero de más de 20 mil elefantes que había en los 60, pasamos a los apenas 200 del presente.
A partir de 2005 la Fundación Carr firma un acuerdo por el que se compromete a financiar el parque y su recuperación, así como favorecer a las comunidades influenciadas por él.
El objetivo de la Fundación Carr en el parque, es reestablecer las poblaciones de animales que originalmente poblaban la zona para atraer turistas y a partir de esto poder desarrollar todo el área de influencia del parque, que afecta a unas 150 mil personas. El año 2005 ya tuvo más de dos mil turistas y hoy por hoy la Fundación Carr emplea a más de 400 personas.
Uno de los problemas a los que se enfrentan aquí es la renuencia del ministerio a colaborar, ya que esto era territorio RENAMO, hoy partido en la oposición. Pero como digo ése es sólo uno de los problemas a enfrentar. Con la cantidad de dinero que hay en juego, imaginad la cantidad de intereses de interesados sin prejuicios que hay.
El proyecto en sí me parece personalmente muy bien pensado, ya que integra todos los actores vinculados a un parque nacional, integrado en un espacio físico donde, además, vive gente.
Mónica trabaja como Gestora de Educación de la Comunidad para la Conservación (en inglés suena más corto) y en principio su trabajo implica a toda la población del área de influencia del parque, esto es, más de 150 mil personas. De su trabajo depende en gran grado, la integración del parque con las comunidades y viceversa y a largo plazo, la mejora de la calidad de vida local.
Yo, por ahora, las veo venir y ¡vivo y disfruto el momento!

19 noviembre 2007

Cultura 1- Iglesia 0

Hace unas entradas, escribí que Chitengo no se parecía a nada, pero que era como todo y algo más. Pero en este pequeño pueblo que es Chitengo, hay una cosa que no hay, que he tardado en notar y que su ausencia me satisface por lo que implica: No hay ningún tipo de centro religioso, ni mezquitas, ni iglesias, ni sinagogas, ni nada parecido.
Lo que sí hay son manifestaciones culturales, salas de conciertos, teatros, e incluso cerca de aquí, hay un cine "artesanal" que todavía no conozco.
Ayer hubo un concierto de música y baile en una de las muchas salas de conciertos de por aquí, debajo de un gran árbol de buena sombra (que todavía no hay muchos de éstos, porque todavía no han salido las hojas a todos los árboles).
Tuve la suerte de colarme tras el escenario y ver los ensayos previos a la actuación final, que era básciamente para ellos mismos, porque no había turistas y los únicos no locales, eran los trabajadores de por aquí.

No es la guitarra de Jimi Hendrix, pero sonaba bastante bien a pesar de estar hecha con restos de hojalata, madera y alambres. Supongo que a esta gente les das una de verdad y no saben sacarle sonido


Los marimberos, en un descanso del recital. La marimba la tocan hasta cuatro personas a la vez, pero hay muchas más alrededor haciendo ritmos con casi cualquier cosa que les llega a la mano, el conjunto suena increíble


Otros percusionistas, con tambores de madera local cubiertos con pieles de cabra. Tocan con baquetas, con la mano, con el codo, con el pie, con lo que sea...


Bailando con trajes tradicionales encima de la ropa normal, ¡curiosa mezcla!


Y así terminó éste de bailar... hasta que empezó otra vez

El público eran básicamente ellos mismos, por detrás estábamos unos cuantos occidentales haciendo fotos tímidamente (al menos yo)


Los niños son omnipresentes en este país, donde más del 45% de la gente tiene menos de 14 años. Los niños un poco mayores llevan a sus hermanos en la espalda porque su madre lleva a su hermano más pequeño

17 noviembre 2007

Otra vez con las ONG

De nuevo se eschuchan escándalos asociados a ONG, que por la naturaleza de éstas, son más escandalosos.
Al hilo de ésto, salen comentarios, normalmente de gente desinformada, que no sabe cómo funciona el mundo, criticando a las ONG y a quien haga falta, que criticar es muy divertido y sale gratis.
Uno de éstos comentarios que he podido leer venía a decir que es indignante que cooperantes en países africanos viajen en primera, se paseen en coches todo terreno con chóferes y comiendo en los mejores restaurantes.
La demagogia, inocencia y absoluta falta de conocimiento delata a quien dice algo así.
Si muchos cooperantes viajan en primera es porque sus billetes son donados por las aerolíneas, a las que les sale mucho más barato regalar asientos de lujo vacíos, que vaciar uno de turista.
Si van en todo terreno es porque las carreteras tal y como las conocemos no tienen, en gran parte del mundo, ningún parecido con lo que nosotros asociamos a una carretera.
Si van con chóferes no es por comodidad, si no por seguridad. Es mucho más seguro que alguien que conoce el lugar te lleve hasta allí, sin posibilidad de equívocos que te lleven a la "carretera al infierno", o que alguien del mismo color que la mayoría, conduza el vehículo en cuestión, cuando pases alguna de los miles de controles policiales, militares o ambos que puedes encontrar.
Si comen en los mejores restaurantes es porque si comen en los de la mayoría de la gente, probablemente te quedes en alguna indigestión producida en nuestros delicados estómagos occidentales.
Y así podría seguir todo el día. Con esto no quiero justificar todos los desmanes y abusos que se puedan cometer, pero sí pedir un poco de comprensión y si tienes una opinión que dar, un poco de información antes de emitirla.
Por supuesto el asunto del Arca de Zoé no tiene justificación y es algo absolutamente deleznable y, la tan aplaudida por el PP, acción de "SúperSarkozy", ha sido lo peor que se podía hacer (la acción no aplaudir), toda vez que los países africanos ven, de nuevo, a los europeos como colonos que se llevan a sus hijos para hacer dinero en el otro lado del mundo. Y todo para proteger a unos criminales "hayan hecho lo que hayan hecho".
Si unos africanos vienen a Europa y tratan de llevarse 100 niños para venderlos en su país, (porque eso es lo que iban a hacer), me imagino los aviones de la OTAN bombardeando el desgraciado país africano.
¡Con dirigentes así quien necesita saboteadores de las ONG!

14 noviembre 2007

Una de ranas

El otro día estuvo lloviendo toda la noche y todo el día hasta que se hizo de noche de nuevo, que por aquí es alrededor de las seis. Así que hubo fiesta batracia, a la que no fui invitado pero me colé, y desde luego mojé... me mojé quiero decir.
Aquí os pongo algunas fotos de la mejor fiesta que he estado desde que salí de Costa Rica (por cierto había una fiesta humana a la vez, a la que estaba invitado pero a la que no asistí... ¡haciendo amigos!)

Ésta está por todas partes y no le hace falta el agua para salir a pasear, pero gracias a las lluvias pudo ver a un montón de amigos que no veía desde el final de la época de lluvias en abril. Es un sapo rojo por cierto


Ésta es una rana de yerba que no busca necesariamente una lámina de agua y se la ve por cualquier prado húmedo, pero que también va a la piscina a ligar


Éstas son unas que ya han ligado y están a lo suyo (hasta que llegué yo y les corté el rollo con las luces estroboscópicas, cuando ellas estaban en la sala de fileteo y no en la del chundachunda)


Lo peor para las dos especies anteriores es que para identificarlas adecuadamente hay que mirarlas el culo, pues el patrón de dibujo en esta área es definitorio de su estatus taxonómico. Supongo que no les apetecía mucho este tipo de retratos


Una rana minúscula que parece un sapo


Ésta es una rana de las que hacen nidos comunitarios de espuma en las ramas que penden cerca del agua. Se pueden juntar decenas de ranas haciendo espuma y expulsando gametos para fertilizar los huevos, que se desarrollan en el nido espumoso con humedad independiente del ambiente. Aquí con un pose entre altivo y "yo no estoy aquí", típico de esta especie


Primera rana "rara", con forma de pelota y que parece que le han cortado las patas. Es muy pequeña y en cuanto puede se entierra cabando con esa nariz tan respingona que tiene


Segunda rana "rara", la rana de goma con bandas, la única tóxica que existe en Mozambique, que se sepa, claro, seguramente hay muchas más ranas de las que se saben


Ésta la vi por el día, yendo de safari. Es una rana toro africana y algunos parientes de esta rana son las que se crían para hacer las ancas, más que nada por su tamaño. Este individuo es un juvenil y no era muy grande, pero ya era más grande que todos los anteriores

11 noviembre 2007

Una de animales

Después del anterior rollo que a casi nadie interesará, os pongo unas fotos para que sigáis visitando mi bitácora.
Comentar que estoy un poco embotado con esto de los idiomas, que definitivamente no es lo mío. Con el portugués... pues depende. Con los mozambiqueños bien, les entiendo muy bien, hablan despacio y claro, con los portugueses imposible, hablan atropelladamente y uniendo todas las palabras que pueden.
Con el inglés... pues también depende. Yo ya tenía pillado los acentos británico y sobre todo estadounidense, pero ahora resulta que aquí hay gente de Zimabwe, que hablan inglés... ¡o eso dicen ellos! Es como ver el Canal+ sin codificador, intuyes lo que está pasando pero no te enteras de nada.
Y aquí las fotos prometidas:

Y empezamos con una de monos, babuinos. Toda la semana pasada hizo una pasada de calor, con temperaturas que llegaron a 41º C a la sombra, así que el pequeño estanque que hay frente a nuestra tienda estaba atestado de todo tipo de animales saciando la sed. Estos babuinos corren despavoridos por alguien que cruzaba por allí. Aquí todavía mandamos los humanos


Este mono bebiendo es de otra especie, le llaman mono verde, no sé muy por qué. Es mucho más pequeño y éste en concreto era un joven bebiendo con más miedo que otra cosa


Ahí mirando a lo lejos, podría ser el toro de osborne sino fuera porque no hay carreteras alrededor. Es un antílope de agua o mucho más sucintamente waterbuck en inglés. Muchos antílopes tienen en inglés la terminación buck, pero no sé qué significa (y Mónica tampoco). Sólo me falta por ver por aquí un starbuck, ¡y espero que no lleguen!


Aquí el mismo pero más cerca, para que no perdáis detalle


Un grupo de marabúes comiendo... algo. El marabú es la cigüeña más grande del mundo, tiene la cabeza como despeluchada y un colgajo rojo en la garganta que le da un aspecto bastante grotesco


Una termita se asoma al túnel que está construyendo con sus compañeras. Las termitas cubren todos sus caminos para que no les dé la luz. Lo que consideramos sus termiteros son sólo la punta del iceberg. Aquí se ven muchas abultaciones de varios metros de alto y unos cuantos de superficie que son termiteros. Como es una zona muy removida la yerba crece muy bien y la vegetación es especialmente frondosa a su alrededor, así que los termiteros son "propiedad" de otro tipo de antílope, el bushbuck, que los vigila y evita el pastoreo de otros herbívoros


Un varano del nilo tomando el sol en una rama justo detrás de la tienda. Los varanos son los lagartos más grandes del mundo y un familiar famoso es el dragón de komodo. Además son los lagartos más cercanos a las serpientes y tienen la lengua bífida como éstas


Y empezamos con las ranas. Ayer llovió mucho y ya está todo lleno de charcas. Eso es malo porque me quedo sin mi estanque lleno de animales sedientos, pero es bueno porque salen un montón de ranas. Ésta es un poco narcisista, será para quitarse el complejo de "sapo"


Y para terminar una salamanquesa de las que habitan nuestra tienda. Esta es una especie distinta, muy pequeña., y que se dejó fotografiar tranquilamente